Como un homenaje al Día Internacional de la Mujer, la Comisión de Justicia, en la sesión 151, intensificó el análisis del proyecto de reformas en materia penal para prevenir y erradicar la violencia contra las mujeres, y sancionar la violencia sexual digital, por lo escuchó las observaciones desde la Cancillería, ARCOTEL y una experta Italiana.

De su lado, Verónica Aguilar, de la Cancillería, explicó la posibilidad de que Ecuador se adhiera al Convenio de Budapest contra la ciberdelincuencia o delitos informáticos pasa por la invitación del Consejo de Europa y de los países que forman parte del mismo, cuyos procedimientos son distintos a los que se manejan con los tratados de Naciones Unidas, para lo cual se han establecido varios contactos y existe información específica sobre los cambios a la reglamentación interna y la legislación que tendría que implementar nuestro país para lograr este objetivo, precisó.

En cambio el legislador Héctor Muñoz indicó que la Cancillería debería designar un funcionario permanente para trabajar de manera conjunta en las reformas legales indispensables para que el país se incorpore a dicho instrumento internacional.

Mientras tanto, Paulina Murillo, Ana Jácome y Paulina Zhunio, de la Agencia de Regulación y Control de las Telecomunicaciones, describieron que el 23 % de la mujeres han sufrido abusos o acoso en línea al menos una vez su vida, el mayor impacto de las prácticas de violencia digital cuando están dirigidas a niñas y adolescentes, 1 de cada 10 mujeres ha sido víctima de alguna forma de violencia en línea desde los 15 años de edad, el 25 % de las mujeres que fueron objeto de violencia en el internet han reducido su presencia en línea, generando una causa de depresión, suicidios, aislamiento, plantearon que en las reformas al COIP se fijen las normas sobre hostigamiento y acoso de forma sistemática, insistente y reiterada, tras invocar a sumar voluntades para garantizar un internet seguro.

Por su lado, Silvia Semezin, experta Italiana, investigadora universitaria en temas de violencia de género de la Universidad Complutense de Madrid, manifestó que la difusión sin consentimiento de material íntimo debe ser sancionado, la proliferación de tecnologías digitales y el uso de las redes sociales otorga nuevos medios para reforzar formas de violencia ya existentes, en Europa 9 millones de mujeres han sufrido de algún tipo de abuso en linea desde los 15 años; en el mundo, las mujeres están expuestas 27 veces más que los hombres en la red.

Finalmente, la violencia digital en contra de las mujeres tiene distintos tipos, no solo la difusión sin consentimiento de imágenes íntimas, sino también el lenguaje de odio sexista, insultos, ofensas, amenazas, ciberacoso, robo de datos personales y la extorsión, la clave es asegurar que las leyes estén orientadas a tutelar y proteger a las víctimas, esto viola la privacidad y destruye la vida de personas, por lo que tiene que ser considerado como delito de género.