LOS SINIESTROS DE TRÁNSITO SON CONSIDERADOS UN PROBLEMA DE SALUD PÚBLICA

Los siniestros de tránsito son actualmente la principal causa de muerte entre niños y jóvenes de 5 a 20 años, dijo el investigador en temas de seguridad vial, Raúl Pérez, durante el tratamiento del proyecto de Ley Orgánica Reformatoria al Código Orgánico Integral Penal para la Recategorización de las Contravenciones de Tránsito, el Fortalecimiento de la Seguridad Vial Preventiva y la Reducción de la Carga Procesal en Materia de Tránsito dentro de los juzgados del país, a cargo de la comisión de Gobiernos Autónomos de la Asamblea Nacional.

Además, el investigador explicó que la seguridad vial constituye un problema de salud pública, ya que cada 24 segundos, en alguna parte del mundo, una familia pierde a un miembro en las vías. Estos eventos ocupan camas en unidades de cuidados intensivos, requieren cirugías complejas y procesos de rehabilitación prolongados. Los riesgos son conocidos, prevenibles y las consecuencias implican años de vida perdidos y familias empobrecidas.

Así mismo, los criterios que definen un problema de salud pública, entre ellos: la magnitud, gravedad, equidad, prevención, enfoque poblacional y la carga económica.

También, Pérez expresó que la velocidad es el principal factor de riesgo identificado por la Organización Mundial de la Salud como responsable de muertes y lesiones en el tránsito. Otros factores relevantes son conducir en estado de embriaguez, no utilizar el cinturón de seguridad y el uso inadecuado del casco por parte de los motociclistas.

Por lo que, las lesiones graves derivadas de los siniestros generan otro tipo de problemática, las víctimas suelen ser personas jefas de hogar, principalmente jóvenes y hombres en edad económicamente activa.

Mientras tanto, la información relacionada con los hallazgos sobre los niveles de velocidad en Quito, así como datos sobre el uso del casco, del cinturón de seguridad y de los sistemas de retención infantil son alarmantes, sostuvo.

Finalmente, la situación de acuerdo con los estudios realizados, Raúl Pérez concluyó que las estrategias más efectivas para reducir la mortalidad vial son el mejoramiento de la infraestructura segura y la reducción de la velocidad.