La Empresa Pública Metropolitana Metro de Quito informó que avanzan los trabajos de reparación de la unidad de tren UT 16, que se encontraba fuera de servicio desde el 25 de noviembre del 2023, tras un incidente operativo en la fase de pruebas afectó su sistema de suspensión secundaria y el fuelle intercirculador.
Desde el 5 de mayo del 205, bajo un contrato de servicios con la empresa CAF fabricante de los trenes, se ejecutan las tareas de sustitución de piezas y montaje de nuevos equipos. Se prevé que la unidad tractiva 16 se reincorpore a la operación comercial a finales de julio fortaleciendo la capacidad de la flota y brindando mayor comodidad a los usuarios.
“Avanzamos en el fuelle, que protege el pasillo de intercirculación (comúnmente conocido como acordeón) para que las personas puedan desplazarse al interior del tren de coche a coche. Estamos realizando este montaje con nuestro equipo técnico”, explicó Edwin Restrepo, de mantenimiento de la CAF.
Una vez instalado los nuevos componentes, la unidad pasará por una fase completa de pruebas de seguridad para garantizar su óptimo funcionamiento. “Solo después de estas verificaciones podremos anunciar a la ciudadanía que el tren está listo y puede operar con total seguridad”, dijo Restrepo.
Según, Damián Bolaños, coordinador de Material Rodante del Metro de Quito, el compromiso del equipo técnico: “Está desplegado al 100% para optimizar esta unidad. Nuestro objetivo es garantizar eficiencia en el mantenimiento y plena seguridad para la ciudadanía”, señaló.
La reparación de la unidad se enmarca en un contexto de acciones legales iniciadas por la EPMMQ. Desde el incidente ocurrido que inhabilitó a la UT 16 en noviembre del 2023, la EPMMQ ha realizado todas las acciones administrativas necesarias para su reparación y determinación de responsables; es así como la empresa aseguradora, en mayo del 2025, autorizó el avalúo y coste de las reparaciones necesarias contratando al proveedor autorizado para el arreglo de la unidad.
Mientras tanto, la EPMMQ, impuso las respectivas multas a la constructora CL1, por no instalar el sistema ATO (Operación Automática de Trenes) en la unidad averiada.
Finalmente, este proceso demuestra que el Metro de Quito no se detiene: trabaja en múltiples frentes para garantizar un servicio de calidad, seguro y eficiente para todos los usuarios. Con la reincorporación de la UT 16, se reforzará el servicio en las horas de mayor demanda y se seguirá consolidando un sistema moderno, confiable y sustentable.
